domingo, 9 de julio de 2017

Valor de cambio

Andy Warhol. "Hammer and Sickle". 1977























"Según los sociólogos y economistas Nitzan y Bichler, el capital funciona como poder y sabotaje, y sostengo que este concepto se puede aplicar al mundo del arte. Es fácil observar como las grandes casas de subastas, las grandes galerías y ferias de arte trabajan juntas, apuestan por una obra, por “x” artistas y les hacen alcanzar ciertos precios. Es un sistema puramente especulativo. Lo curioso es que la escena artística es muy crítica, en lo que a contenido se refiere, con el capitalismo, el neoliberalismo y las finanzas especulativas. Pero honestamente, nadie se preocupa por el contenido. Quizás el artista se preocupa por dar visibilidad a ciertas temáticas, se dan conferencias sobre Marx y Žižek se conecta con Skype en ciertos eventos… pero la distribución de arte no se dedica a mostrar el contenido de las piezas, sino a servir a su amo como ha hecho siempre, y eso es pro-capitalismo".
Armen Avanessian.



Más que una predicción, acaso podría aventurarse deseo, es ni más ni menos que la constatación del estado cultural de las últimas décadas. Una declaración revolucionaria en tanto en cuanto es anunciada, declarada y remarcada en un mar de silencio, en la distraída no-opinión de quienes participan activamente en su mantenimiento. La dialéctica del cinismo y la prevaricación cultural.