Ice Age

Antonio D. Resurrección. "Aquí vienen las olas". Serie "Interferencias". 3 piezas de 14 x 10 cm. Fotografía. 1999

Nunca el hielo transmitió tanto calor, debería intentar no quemarme...¡al diablo con todo!... siento la vida en cada segundo, en cada momento espectacular, "sentir" es una droga que, cuando llega, arrasa con todo lo calculado, es el momento y sepan (mis amigos: esos pocos que me soportan y me adoran) que no renunciaré a sentir lo que siento ahora mismo. Mañana habrá tiempo para calcular el despropósito o la hazaña de un corazón que se niega a ser mera bomba de riego en proceso de "desaceleración", ningún brazo a torcer porque creo en lo que palpita en este torpe tórax asténico y "creer" es un privilegio que pocos se pueden permitir. Así estamos.

You do something to me, something deep inside
I'm hanging on the wire for a love I'll never find
You do something wonderful then chase it all away
Mixing my emotions that throws me back again
Hanging on the wire, I'm waiting for the change
I'm dancing through the fire, just to catch a flame
an' feel real again

You do something to me somewhere deep inside
I'm hoping to get close to a peace I cannot find

Dancing through the fire just to catch a flame
Just to get close to, just close enough
To tell you that.....

You do something to me something deep inside.

Paul Weller. "You do something to me". 1995

Tiempo de descuento

Antonio D. Resurrección. "Aire y asfixia". Serie "Interferencias". 100 x 70 cm. Fotografía. 1999

Cómo contener el pecho con un corazón tan alterado, cómo tranquilizar, disimular los ánimos y enfriarse ante la llamada de la prudencia: "Dear Prudence". Querer y no poder (deber), atrapado en el maldito juego de la sensatez y el estado de las cosas. Saluda con la mano, mantén la sonrisa... Au revoir, little iceberg...

A veces te parece que se va
y crees que ya nunca va a volver,
que hará un viaje largo a otro lugar,
que olvidará tu foto de carnet.

A veces te parece que no está,
que estuvo pero que un día se fue,
que se comió la tarta entera y que
también dejó la cama sin hacer.

A veces te recuerda que una vez
como un perro volvió para decir
las cosas que quedaron sin hablar,
las cosas que más valen.

A veces te parece que no está,
que estuvo pero que un día se fue,
que se comió la tarta entera y que
también dejó la cama sin hacer.

A veces te recuerda que una vez
como un perro volvió para decir,
las cosas que quedaron sin hablar,
las cosas que más valen.

Niños Mutantes. "Arañicas". 2008

Auto-vas?

Con finos dedos agarra el pasamanos, gafas sensual-cool, transportting público, Glasgow, Málaga, maletas condena, roce de manos, miradas cómplices tras muros sunglasses, tocado!, ipod desconectado ya, casuística open your heart, sígueme al fondo, sí, geíseres en implosión, gélido calor, mucho calor, ay!, absurdo prolegómeno, rioja crianza, Rollings en su pecho, dibujos detallistas, rotula rotula, juventus gran camino, Violetta(l) y viaje, también Sara, complementario amarillo pantone 123, rubia la cerveza, transbordo y, al abordaje, me bajo en la próxima, complicidad, zapatos golden slumbers, trasiego, tránsito, "Scotland's Shame", París, Delicatessen, Macintosh Arts & Crafts, Daarjeling-Manolete, otra vez le llamaban "Brody", o "Wood", toco madera: Icelandic wood, Sigur, la Guðmundsdóttir y las gemelas Belle, alive and kicking, el aliento de la vida intensa, rápido, tú sabes how does it feels ¿no?, eso ¿no?, no es un sueño Gondry, linda, linda, muy linda, botas negras mogwai, brazalete bizantino, mismo camino, calle, ¿destiny child?, corona devaluada, queen o frog princess boquitafresa, god save the Queen!!, breve, abrevie, aydiós! qué pinchazo más grande, ese temblor adorable, con canas al aire, al cielo con ellas!, a la recherche!

La ciencia del sueño

Es curioso constatar cómo la saturación de información, en donde lo fílmico se muestra paradigmático, puede llegar a alterar la percepción de lo real, lugar común no suficientemente asimilado. Un síndrome contemporáneo que podríamos calificar como "quijotesco" en su interpretación menos heroica y más patética. En este mundo alterado en permanente actividad paranoide (más Sitges que Cannes), la persona tiende a confundir sus angustias con la vivencia de lo real, de tal manera que llega a violentar el orden natural de las cosas (constante paralelismo entre ambos ámbitos) hasta convertir, converger sus miedos en la propia manifestación de lo real. El mundo paralelo otrora irreductible se transmuta en una suerte de bestia demencial.
Ahora se cumplen todas las"predicciones", ahora la realidad es lo soñado antes en forma de pesadilla distorsionada. Así, el alma de la persona debería descansar en paz al verlo uno indisoluble, gozosa de colmar sus más oscuras expectativas: aquel mundo paralelo es ya suyo por méritos propios, un punto impropio que se ha alcanzado converger. En estos casos ha de deseárseles (por pura indulgencia) no regresar a la tierra nunca y que el cielo guarde a esos pobres infortunados, porque las alturas están hechas para los fuertes de espíritu. Ya debemos saber que es peligroso volar sin convicciones reales. Se tienen o no se tienen.

La soledad del corredor de fondo II

Antonio D. Resurrección. "El deseo #1". Serie "Emergencia". 50 x 35 cm. Backlite fotográfico sobre caja. 2006

Al igual que en el Arte, en las relaciones humanas existe una barrera infranqueable entre las personalidades singulares y las que navegan a la deriva o cumplen un rol social prefijado. Un miedo remoto que carece de paliativo, somatizado en forma de rechazo o incomprensión. Sólo sacrificando el inmenso tesoro del que se dispone es posible el acercamiento en forma de parasitismo inconsciente.

“La denostada incomprensibilidad del arte hermético es el reconocimiento del carácter enigmático de todo arte, y la indignación ante las obras de arte hermético procede en parte de que sacuden la comprensibilidad de cualesquiera otras”. T.H.Adorno

Inercia cíclica

Antonio D. Resurrección. "Falso movimiento #1" (Serie Circular). 100 x 20 cm. Fotografía digital láser. 2005/06.

Mientras iba de tu mano hacia la montaña,

unos días eran fuego y otros eran llamas.

Dentro del espejo donde no me reflejaba,

la promesa que en la cima nos aguardaba.

Pero una vez allí las nubes no nos dejaban ver el suelo

y una sensación que tuve fue miedo.

El camino de bajada era más estrecho,

se podría decir una bajada a los infiernos.

Te pedí que me guiaras cuando estaba ciego,

la montaña fue quien respondió con eco,

un eco que reproducía exactamente mis lamentos,

los sueños que una vez tenía y ya no tengo.

Un camino de torturas y de sufrimiento

que me ha traído donde ahora sigo muerto,

rezando para que alguien me levante del suelo,

donde estoy abandonado.

Así que te pedí lo menos y no quisiste darme nada

y ahora que ya no te quiero, me llamas, me llamas ...

Los Planetas. "San Juan de la Cruz". 2002

La transparencia del mal

"Si se quiere perjudicar a alguien lo único que hace falta es decir de él alguna verdad". Nietzsche

Y yo soy transparente, cuestión de cabeza y corazón. A ver quién consigue consigue callarme.

Días de vino y rosas (y otras cosas)

Como Sísifo, de nuevo, pongo en movimiento la gran piedra, porque me consta que algún día parará el rodaje, claro está por una temporada (no más fábulas de primaria), con la entereza de quien se ha despojado del cariño adictivo pernicioso. Cambiando iniciales y tachando muescas de los árboles a un ritmo vertiginoso. Fast love, great movement. Qué placer respirar con las ventanas abiertas de par en par. Y que alguien haga el favor de recordarme, en caso de amnesia (inequívocamente temporal), de mantenerlas siempre abiertas.

Llueve sobre mojado

A voluntad no nos gana nadie. Viniendo de una estirpe habituada a navegar contra viento, marea y "amigos" envenenados, no supone más que el ejercicio diario al que nos tienen acostumbrados. Algunas veces en forma intencionada y las más, de manera gratuita. Mi sabia madre suele decir que nunca nos salieron las cosas a la primera, siempre antes un obstáculo que el destino juguetón nos puso en medio del camino, para hacernos fuertes o terminar de matarnos. Nada de fatalismos sino cuestión de estadística. Lo mejor, que pocas cosas sorprenden y las seguimos narrando.

Lluvia cordobesa, lluvia sevillana y, cómo no, lluvia granadina. Mojados y bien mojados, húmedos sobre un asfalto repleto de accidentes, manos a la cabeza y gestos desesperados, largas caravanas de rutina fin de semana, volviendo a Granada, la tierra que me proporcionó tantas noches en vela y tantos otros ejercicios espirituales de madurez sentimental. Granada, la ciudad hechicera, después de demasiadas visitas canceladas por aquellos avatares del destino (el jodido "destino" que me tiene realmente podrido...), volvía a recibirme con los brazos abiertos.

Aparición estelar... Comienzo a perder identidad a golpes de confusiones...tal artista, tal cantante...-"felicitaciones por el nuevo disco"-...-"Sí, gracias, estamos muy contentos con "Las amargas lágrimas de la chica descerebrada""-... No hay nada como ser artista.
Una vez más La Industrial es el peor lugar para escuchar música, cuesta creer que en un espacio dedicado a la electrónica suenen siempre tan mal los graves...
Y mis niñas, víctimas de una parálisis escénica incomprensible (¿son realmente siempre así?) producían un efecto de aspirantes a karaoke poco aconsejable. Las voces se perdieron entre los bellísimos y adictivos ritmos electropop. Canciones grandes que merecen un mejor día, un mejor sitio y una mejor puesta en escena. "Velocífero" es un disco notable y a guapas y cool no les gana nadie: qué encanto de vestidos.
En el after, mis amigos del M.C. retomaron la dirección hacia donde debían haber estado las cosas siempre. Indie-dance eliminador de toxinas, joie de vivre!!!. Luego visita obligada a la ermita del Music con charla con niño mutante, embarazada, abandonada, aspirantes y Albarn, eterno cicerone. Final apoteósico-decadente en el Sugar.

"...que la que yo más quiero me está esperando..."

Ladytron. Industrial Copera. Granada. 31 de octubre de 2008.