Mimi Parker. 1967-2022. Rest in peace
“… The consequences of leaving
Would be more cruel if I should stay
Though it's impossible to say, I know
Still, white horses take us home…”
Siempre fueron de esas formaciones norteamericanas de los noventa a las que nunca presté excesiva atención. Hasta que alguien hace muchos años, en el 2008, me recomendó (¿me regalaron la entrada?) que no me perdiera un concierto en el Teatro Central de Sevilla. Los temores más que fundados ante coincidencias desavenentes me hicieron dudar de la asistencia. Fui solo, como solamente debiera ir cualquiera que se prestara a semejante epifanía. Estaban en pleno “Drums & Guns” y sin previamente haber escuchado nada, la permeabilidad de aquellas canciones trascendieron una razonable sensatez del destino. Aquello fue un durísimo final definitivo, rematado por una penitencia pedestre por la interminable calle José de Gálvez, entre decadentes restos de una distópica exposición universal. El amor de una vida se escapaba ante mis ojos impotentes mientras la cinta sonora, la resonancia magnética de The Great Destroyer, avispaba los ojos y enaltecía el corazón. Un colosal drama ultramarino difícil de obliterar, complicado de extraviar en los posos de la memoria.
Luego vinieron muchos conciertos donde la magia litúrgica seguía surtiendo efectos colaterales de prolongado radio, no se trataban de coyunturas sentimentales, mas la vis emocional hacía de los Duluth una terapia insoslayable de cualquier ser-en-el-mundo. De allí hasta la eternidad. Hasta el último y venerado evento en el inefable Auditori de Barcelona del 2022. Las escenificaciones del universo Low siempre han exhalado un brillo finisecular, un susurro crepuscular de múltiples dimensiones y consecuencias impredecibles. Allá en la oscuridad del contraluz se perfilaba una discreta tragedia anunciada en
sotto voce, el contorno de una baterista difícil de sustituir, la silueta de una voz de huella dolorosamente auténtica, gentilmente humana. La dimensión transoceánica de una pérdida irreparable. I Mimi mine. Respect.
“When they found your body
giant X's on your eyes
with your half of the ransom
you bought some sweet, sweet, sweet
sweet sunflowers
and gave them to the night"