David Lean. “Brief Encounter”. 1945
“… Bunter Vogel
Schwarzer Vogel
Dein Gefieder brennt…”
Los dilemas existenciales forman parte ya de otro periodo de la historia, no de este siglo. Asumir los deberes y enfrentarlos a los deseos, esporádicos o trascendentales, supone un trauma esencial entre el mundo de la pulsación y el racional. La ilusión de lo que hubiera podido ser se transforma en una solución letal que hipoteca la dicha de manera irreversible, aun a sabiendas de que toda concreción del deseo se suele transformar en pueril capricho. La condena de la deriva o la condena de la estabilidad. Pena máxima.
“… Bunter Vogel
Schwarzer Vogel
Dein Gefieder brennt…”
Los dilemas existenciales forman parte ya de otro periodo de la historia, no de este siglo. Asumir los deberes y enfrentarlos a los deseos, esporádicos o trascendentales, supone un trauma esencial entre el mundo de la pulsación y el racional. La ilusión de lo que hubiera podido ser se transforma en una solución letal que hipoteca la dicha de manera irreversible, aun a sabiendas de que toda concreción del deseo se suele transformar en pueril capricho. La condena de la deriva o la condena de la estabilidad. Pena máxima.
No hay comentarios:
Publicar un comentario