domingo, 20 de septiembre de 2009

Flotador
















Michelangelo Antonioni. "L'eclisse". 1962


A veces me pregunto, aunque la respuesta se encuentre en mi propio bolsillo (no es más que un juego retórico), por qué las personas esperan a tener "recambio" para cambiar sus vidas...

4 comentarios:

Julio dijo...

El salto al vacio y sin red da mucho miedo.
Pero ese salto te puede dar más alegrias de las que uno piensa... aunque desgraciadamente muchas veces solo te das un porrazo contra el suelo.

Antonio D. Resurrección dijo...

Bueno, a eso lo llamamos "vivir" y quien no tiene valor para vivir no puede decirse que esté "vivo".
Lo malo es cuando, con nuestro hatillo de traumas, implicamos a terceros...
La debilidad se puede perdonar, la imprudencia, jamás.

Suerte, camarada!

Kilometrica dijo...

Solo la imprudencia puede llevarte al máximo estado creativo

Antonio D. Resurrección dijo...

Me temo que no comparto esos presupuestos creativos