viernes, 29 de mayo de 2020

Blackout

Antonio Pietrangeli. "Io la conoscevo bene". 1965

"... Der Schmerz, der Stillstand des Lebens
Lassen die Zeit zu lang erscheinen..."

Asunción del rol vital afectado, interferido por las concomitancias de las convenciones y sobrecargas sociales.
La aceptación de la imposibilidad de una quimera terrenal, en cierto modo ilusoria, factible. El entendimiento último de los límites del propio individuo, su “fracaso” como programa de realpolitik metamorfoseado en una liberación de obligaciones y esfuerzos ímprobos. Merecida, vehemencia incontrovertible, "destitución subjetiva" a modo de epílogo, más allá de valoraciones teleológicas.
La estrella de la muerte. Apreciación del recorrido final, entre ser y haber podido ser. La dignidad decisoria de la determinación. Conocerse bien. Nobleza en sí y per se.

domingo, 24 de mayo de 2020

Perte D’Identité

Jean-Charles Fitoussi. “Les Jours où je n'existe pas”. 2003

“… This isn't happening
I'm not here
I'm not here
In a little while
I'll be gone…”

«Celui qui a été ne peut plus désormais ne pas avoir été:
désormais ce fait mystérieux et profondément obscur
d’avoir vécu est son viatique pour l’éternité». Vladimir Jankélévitch.

Fuera del radar, la desubicación del sujeto genera una suerte de evocación fantasmática que resuelve convertir en presencia la carencia de fisicidad. Things we lost in the fire.
Esa imagen latente es tanto la evidencia aquilatada de lo que ya no es, como de lo que no puede dejar de haber sido. La prueba fidedigna de existencia confirmada, viviendo, significante y significado.
Un acto testimonial de re-conocimiento inconsciente, más allá de la lógica evidencia objetiva. La negación del presente sólo concierne al instante y la cualidad predecible, “en-toi-ne”. Una posibilidad en lo creable y lo creíble.

viernes, 22 de mayo de 2020

Geometría variable

Angela Schanelec. “Ich war zuhause, aber”. 2019

Desde ese riachuelo, desde esa afección de humedad y abandono.
Desde la ingratitud del discurrir del tráfico.
Desde el arrollador sentimiento de futilidad y desasosiego urbano.
Desde la vista cansada y la compunción fraternal de comunidad.
Desde la torre más alta y la noria cronómetro.

El tiempo inmóvil, tal vez ralentizado, incita a la reflexión y con ella, al desapego.
Stimmung frente a un determinismo mediocre y absurdo. Es la representación de lo indeterminado e intangible, la necesaria explicación de lo más simple y doméstico, mas fluctuante. El pausado huracán de los latidos. Un bricoleur de las emociones e imágenes reparadoras de contornos borrosos, como la mirada sincera que dejó de mirar en un nuevo panorama de nubes pasajeras y cielos protectores. La incuestionable y arrebatadora belleza de lo honesto.

lunes, 18 de mayo de 2020

Invectiva

Peter Strickland. “Berberian Sound Studio”. 2012

En la cultura de las palabras sin memoria, de la levedad e inconsistencia del verbo, de la oportunidad de la falacia y lo falso a modo de argumentario distintivo.
Una absoluta y clamorosa falta de trascendencia, relevancia. Esta ausencia de responsabilidad y conclusiones ha generado un mundo que prescinde de lo verdadero como paradigma social. La mentira trocada por auténtica y genuina certeza posible. El compulsivo acto del privilegio en la ruina, el fatalismo del lado oscuro de la humanidad. Gran mancha negra que se extiende a lo largo de las exiguas y mermadas murallas del idealismo.

domingo, 17 de mayo de 2020

Objeto indirecto

La caja del diablo. Comunicación audiovisual. Madrid. 2020

“… There's a universe of disappointment to be lost
How little we need to be happy
How little we need to be really happy…”

Esos objetos inmóviles que gravitan en el sistema individual. La verdadera coreografía silenciosa de pequeños trofeos, pergeñados en el reflexivo plan de listas de deseos concretos, corpóreos. Objets-trouvés.
La versión más humana y bastarda de la acumulación capitalista dotada de senso y sensibilidad. Una coral de armonía doméstica que arropa la rutina diaria. El gran refugio antiaéreo a prueba de trampas de seducciones de cartón piedra, de melodías trucadas, de perniciosas enajenaciones. Fisicidad de lo re-conocible carente de traición o decepción. La extensión de uno mismo (sujeto-objeto) especular, inmóvil, eterna. High fidelity.

jueves, 14 de mayo de 2020

El parpadeo

Jacques Doillon. “La Pirate”. 1984

“… Bien avant qu'on se soit perdu
Oui bien avant qu'on n'ait rien gagné
Bien avant les coups de massue
Je savais déjà tout ce que je sais

Bien avant qu'on soit des pendus
Bien avant qu'on soit des regrets
Bien avant que tout soit fichu
Je savais déjà
[Don’t worry… ]
Que tu t'en foutais
[be happy… ]…”

Mucho antes, cuando el discurso resultó un sano equilibrio de preguntas y respuestas, miradas dulces y comprometidas, el complejo recorrido de un apasionante camino.

Mucho antes, de las tormentas y las decepciones, de las madrugadas en blanco, levantando adoquines donde no hay playas, ni viento que aleje las impurezas de los despojos de condiciones des-humanizadas, alienadas, enajenadas.

Mucho antes de la arena, del polvo, de la ingravidez.

lunes, 11 de mayo de 2020

ASMR

Jacques Rivette. “Histoire de Marie et Julien”. 2003

“… Long may we cheer and sing!
Long may our floodlights shine!
Long may the blue light shine upon us all!
in our holy space…”

Si, como se reconoce, el espectro atribula la menguante conciencia de la culpabilidad, la melancolía le permite acrecentar su presencia hasta unos niveles casi corpóreos.
Y si las ánimas, en un gesto doblemente suicida, deciden alterar el orden de la visceralidad de lo vívido, el complejo juego de reflejos habilita un nuevo orden de lo presuntamente real.
Tan sólo una improbable transubstanciación milagrosa, si por extra-ordinario entendemos el cambio fundamental de la esencia del ser, trans-formación de un viaje único, tránsito, en la viabilidad del retorno.
Aunque sea recomendable no viajar con un muerto, del ámbito de los afectos genuinamente verdaderos surge aquella metamorfosis. Cuando alevosamente dejamos de ver, para re-generar una nueva presencia. This is the gate. La más hermosa posibilidad de sangre y lágrimas verosímiles, el efímero latido genuino sincronizado, desde lo ominoso, en lo fantástico, hasta lo maravilloso. Tic-tac, tic-tac, tic-tac... Belles histoires.

domingo, 3 de mayo de 2020

Diegético

Alain Robbe-Grillet. “L’Éden et après”. 1970

Un nuevo itinerario laberíntico de propuestas incómodas, atrevimiento de lo distinto, fundamentado sobre grandes trazos de pulsaciones pero, también, en una orquestación magnética como ingrediente de lo conceptual.

Fronteras entre mundos diferentes y complementarios. La realidad metamorfoseada en el líquido viscoso inmaterial onírico y el sueño prolongado en una estructura consuetudinaria, cimentación narrativa aparentemente convencional. Personne, d'autre, l’éden.

Extrañamiento que aspira a simbolizar un estatus del presente repleto de contornos borrosos y palpitación en el deseo, en el reparto cromático de tonos afrancesados o el sueño del espíritu de una revolución inconclusa, apenas esbozada sobre el siglo pasado, huérfana de dignos herederos. C’est ton héritage.

La sangre, el sudor, la carne, superpuestos en estratos gestuales, mise-en-scène de lo cotidiano. El enlace contractual de los vínculos de cadenas en legato.
Subyugante, alles in allem.