jueves, 17 de julio de 2008

Las culpas

















Juana Molina actuó ayer en el Centro Andaluz de Arte Contemporáneo de Sevilla. Demasiados accidentes previos y el clima bochornoso parecieron determinar lo que fue un desarrollo seco y distante. Muchas distracciones, desorden y charlas estivales en los jardines del centro. Ni siquiera quiso tocar "Vaca que cambia de querencia". Dura, lejana, de oficio. Un día para olvidar por bastantes motivos. Cuando se juntan la climatología adversa y mi estupidez crónica, lo oportuno es quedarse callado, desaparecer. Soy capaz de lo mejor y de lo peor. Con lo ilusionado que estaba...

4 comentarios:

Ya no soy yo. dijo...

Cuando se juntan la climatología adversa y mi estupidez crónica, lo oportuno es quedarse callado, desaparecer. <--- Me desmayé.

La "mala estación", la estupidez y los silencios que matan -para salvar la vida-, me han hecho chirriar los huesos en los últimos días.

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¡¡¡Buen Viaje!!!
Que sea ojos, oídos y corazón ;)

El puro disfrute.

Más palabras verificadoras "extrañas", normalmente las odio... pero aquí tienen ese nosequé que ya hasta las espero xD

dvoir <--- todo un jueguito de "palabras"

Antonio D. Resurrección dijo...

Las estaciones son pasajeras, o al menos deben serlo.

Por el lado de la diversión, ningún problema: tenemos excedente. Esperamos sobrevivir para contarlo.

"dvoir", buenísimo.

Las mías no suelen ser tan especiales.

Un beso. Chau ;

Helena Martín dijo...

qué pena!
Hace poco estuve en Sevilla y tuve el honor de experimentar ambas cosas climatología y estupidez crónica :)
Aún así el viaje me encanto.

Antonio D. Resurrección dijo...

"jo tiiia", eso se avisa! :)